Ikigai: cómo saber qué te motiva y te mueve

Tips para que esta elección sea lo más fiel a ti.

Escuchamos desde que somos txikis (peques) esa pregunta tan demoledora:

¿Y tú qué quieres ser de mayor? Muchas de las respuestas son repetidas entre multitud de personitas. Otras, apuntan maneras y se las ve que no van a ser precisamente tradicionales. Si te hiciesen hoy esa misma pregunta ¿responderías lo mismo? Seguramente no.

¡Y menos mal! ¿Te imaginas que todo el mundo fuese igual? Menudo aburrimiento.

De eso se trata, de ir descubriendo qué te gusta, qué te motiva, qué se te da bien. Porque sí, tenlo claro, hay algo en lo que lo petas. A este concepto, que toda la vida se le ha llamado vocación, ahora es muy conocido como Ikigai, que significa «razón de ser» en japonés.

¿Y qué es esto del Ikigai? 

Te cuento. Realmente este concepto japonés tiene una traducción literal, pero básicamente se refiere a “eso que hace que valga la pena vivir”. 

Lo que te mola, con lo que disfrutas, lo que te llena de vida. El para qué has venido a este mundo. A veces no es fácil darse cuenta de cuál es el tuyo.

¿Por qué es importante conocerlo?

Centrándonos en tu perfil profesional, es una de los conceptos que tienes que tener claro para aplicar en tu comunicación. Todo empieza desde el autoconocimiento. Hay que hacer introspección, mirar dentro.

Por ejemplo: si quieres crear las bases de tu comunicación, necesitarás:

• Conocer la forma en la que vas a hablar de y sobre tu marca a los demás → Brand Voice
• Qué historia hay detrás de toda tu marca: por qué existe, cómo empezó, etc → Storytelling
• Que tu esencia se vea reflejada en el aspecto físico de tu marca → Identidad visual

Todo esto, hablando de marcas, lo metemos en el saco del branding, que es quien se va a encargar de que todas esas piezas encajen para tener el famoso efecto WOW.

¿Cómo descubrirlo?

Tienes que tener en cuenta 4 puntos:

1. Lo que más te mola hacer.
2. Qué crees que el mundo necesita. 
3. Por lo que te podrían pagar. 
4. En lo que eres una crack. Lo que se te da bien hacer. 

Porque no vale de nada tener un trabajo en el que te paguen bien, si no te llena de verdad.

¿Qué te ha parecido? Te invito a investigar más sobre el tuyo.

Te leo en comentarios y te espero en el siguiente post para seguir aprendiendo.

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